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Corporativo
3 de diciembre | 2015

Revive la historia de vida de Adolfo Almarza

“Hoy en día, yo te puedo decir que arriba de mi bicicleta y disfrutando con mi familia, soy la persona más feliz del mundo”

Por Administrador General

Adolfo desde muy pequeño se caracterizó porque tener habilidades para hacer muchos tipos de deportes. Estudió en un colegio rural, fue seleccionado de básquetbol y a los doce años, viajó a argentina donde lamentablemente de regreso, el chofer se quedó dormido provocando el accidente que le hizo perder sus piernas. Tenía 12 años cuando llegó a teletón teniendo como objetivo el trabajar duro por la obtención de las prótesis que le devolvieran su activa vida. Y ahí empezó la rehabilitación. Con una gran familia al lado que le mostró fortaleza. Fueron cuatro meses en que Adolfo sacó lo mejor de sí y logró dar sus primeros pasos. En un momento de ese desarrollo se encontró con la bicicleta, según cuenta fue amor a primera vista. Del momento que la tomó no paró más. Demoró más de 1.200 días de práctica para poder aprender a saltar con ella. Un saltito de veinte centímetros significa más de cuatro años de práctica. Hoy ya tiene 27 años y es el único deportista en el mundo que está corriendo a un nivel profesional de ascenso en bicicleta, y sin piernas. Gracias a su esfuerzo, el de su familia y teletón, Adolfo ha ido cumpliendo uno a uno sus sueños. El más grande de ellos formar junto a su mujer y su hija una familia que sabe cuidar y disfrutar. “Hoy en día, yo te puedo decir que arriba de mi bicicleta y disfrutando con mi familia, soy la persona más feliz del mundo”

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