Jóvenes dejan de lado sus vacaciones y se la juegan por los niños de Teletón en verano

Como parte de las actividades de verano que organiza el Voluntariado Teletón, casi un centenar de jóvenes decidieron destinar parte de sus vacaciones  y acompañar a los pequeños en situación de discapacidad en los talleres especialmente realizados para ellos a lo largo de todo el país. Pero, ¿qué significa para los jóvenes atreverse a acompañar, cuidar y compartir con los pacientes por una semana?

Tres voluntarios se animaron a opinar y contar lo que han vivido en esta experiencia:

Nathacha Véliz, estudiante de Pedagogía Básica, siempre ha tenido cercanía con los niños. Esta vez, decidió integrarse a esta actividad en Antofagasta porque más allá de una instancia recreativa, considera que es una gran experiencia de crecimiento, «te acerca a una realidad que no conoces y te hace crecer y aprender tanto como persona que es increíble, los niños esperan todo un año para esta instancia y se entregan a ti al 100%».

En Santiago, Carolina Guerra (24), estudiante de Derecho, estaba ansiosa de poder vivir por primera vez esta experiencia en vacaciones y quiere extenderla por más tiempo, «uno siempre es capaz de más y por qué no brindar mi tiempo y ganas, no sólo nosotros tenemos mucho que entregar, sino también descubrir que los niños tienen mucho que enseñarnos».   

Más al sur, en la ciudad de Puerto Montt, Matías Piña (22), estudiante de Sicología, ya conoce el trabajo que realiza el equipo del voluntariado en la zona, pero nunca había participado en el Verano Teletón. Esta vez, dejó de lado sus vacaciones familiares para ponerse al servicio de los niños.

«Es una experiencia gratificante, conoces gente nueva todos los días y vives algo diferente en cada momento, el compartir con los niños, que parece difícil al principio, te enseña a disfrutar de cosas simples que a veces olvidamos tener en cuenta en nuestro quehacer diario. Estas experiencias sencillas me hacen dejar de lado mis vacaciones ordinarias y planes, para poder disfrutar de algo que es conmovedor y enriquecedor», comenta.             

El trabajo de integración

El programa Verano Teletón es una instancia que además pretende incentivar a las personas sobre el acceso universal a los espacios urbanos, recreativos y culturales sin importar la condición. Los voluntarios que participan en este objetivo logran vivirlo en primera persona junto a los niños que apadrinan.

«Me gustaría que muchos más jóvenes entendieran en la práctica lo que significa realmente esto», dice Nathacha. Por su parte, Carolina piensa que es fundamental el trabajo del voluntariado, «muchas veces hablamos inclusión, pero muy pocos saben que es lo que en la práctica se traduce. Esta es una oportunidad para saber qué es lo que implica integrar a niños y jóvenes en situación de discapacidad».

De acuerdo a esta experiencia, Matías observa que los niños participan en actividades que no están acostumbrados a realizar en su diario vivir, «conocen gente, los hace integrarse en talleres donde desarrollan habilidades que no tenían ni idea que tenían, lo cual me hace pensar que eventos como estos los ponen a prueba y desarrollan en ellos capacidades que potencian su rehabilitación y su inclusión en la sociedad, además que adquieren herramientas para fomentar su bienestar personal, mental y familiar».

Lo que sólo parece una semana de juegos, para los pacientes significa un gran paso, no sólo en el desarrollo de sus habilidades blandas, sino también en la motivación a integrarse en la sociedad. «Siento que cuando pensamos en Teletón creemos que con sólo el aporte monetario hemos ayudado en esta cruzada. Sin embargo, si nos ponemos a pensar la plata no lo es todo. Con una sonrisa y un abrazo entregas mucho más, por eso estoy acá, para ayudar y apoyar a niños a que sean mejores de lo que ya son», agrega Nathacha.